0

El mito danzado de "la militante revolucionaria"

Género: Danza - Teatro
Título: La duarte (Evita)
Autor: Silvia Vladimivsky
Dirección: Silvia Vladimivsky
Intérpretes: Eleonora Cassano
Compañía: Fundación Julio Bocca
Sala: Sala Roja. Teatro del Canal de Isabel II
Fecha de representación: 14/10/11
Hora: 20:00 pm
Precio: de 15 a 25 €


Una mezcla entre danza moderna y el homenaje más clásico y elegante que podría hacerse a la revolucionaría carismática Eva Perón es lo que representa, sin más, esta obra. Con movimientos detallados, finos y cuasi – perfectos, es el lenguaje corporal quien domina en su totalidad, haciendo visible una clara evolución del personaje, desde sus principios más humildes y sencillos hasta su llegada al poder como una mujer directa y con actitud y aptitud para mandar. Envueltos de una misma melodía con ritmos cambiantes, es posible contemplar, sin moverse de la sala, el malambo y tango argentino, la milonga y el candombe uruguayo, pasando por movimientos musicales que van desde lo clásico hasta lo electrónico.
El simbolismo usado es una parte fundamental de la obra que, a su vez, es expresado de formas muy palpables en los gestos rutinarios de las manifestaciones políticas de la época. Como gran novedad teatral es necesario mencionar el apoyo que durante la actuación se recibe por parte de los recursos audiovisuales, que van desde la propia voz de la militante en sus discursos o canciones, hasta los gritos obreros que se manifiestan o las imágenes reproducidas en la pared de las filas revolucionarias.
Todo ello viene hilado de la mano de Eleonora Cassano, espectacular protagonista de esta obra que, de manera increíble, y siempre en tacones altos (lo cual tiene mérito) realiza los movimientos más precisos y detallados, y nos lleva a conocer a una Evita Perón que no sólo se presenta como política, sino como mujer, haciendo de ella y ante los ojos de sus seguidores, una santa popular argentina inmortalizada en la imagen de una heroína nacional.
Como nota a desagrado de esta espectacular producción solo mentar el error de vestuario producido en el General Perón, que llevaba la etiqueta del traje aún colgada (esperemos que no sea para devolverlo después de la función) y el nefasto playback que Cassano hace de los discursos o canciones de La Duarte. Aún así, ver esta obra hace entender sin palabras, de manera sencilla y solo con expresión corporal, la vida de una persona que, en tiempos complicados, se decidió por cambiar todo y entregarse a su patria y a su pueblo o, en el caso de esta función, a su público.

0 comentarios: